martes, 27 de septiembre de 2016

Sociópatas

¡Hay tanto idiota ahí fuera!
Yo tampoco, Iván.
A veces pienso que ser un poco sociópata
es muestra se salud mental...

3 comentarios:

Angel dijo...

El amigo Ferreiro todo es creatividad, denuncia, pasión, verdad y amor por la vida. Por eso interpreto que no compuso la canción en un día bajo sino que manda al cuerno a "esos" que rebajan la vida. Porque a lo que parece, este año se adelantó que la pandemia. Y con la vuelta hay una plaga de gente que ostensiblemente va a peor, desmejorada cerebral, peligrosa si te arrimas, que tira de coz y relincho que espanta...
Y me gusta la idea de la piscina sin agua porque es un modo original de decir que toca tierra aunque sea a lo underground... Mejor eso que esa condición de telemirón y culebrón, de nadar a la moda... Me va su rebeldía y alegato de la mismidad aunque sea un tanto solipsista... mola ver gente a contracorriente pidiendo el mínimo respeto a la propia identidad. Por eso, ya que dimos aquel premio que llevaba nombre macabeo -¿recordamos?- hoy propongo el ejercicio de dar premio a la estupidez olímpica. Y ya veréis que en número uno cuesta sacarlo porque hay mucho en el corral... Yo empiezo -abro la veda- y propongo como cenutrio mayor al abanderado presidente de USA, Nobel de la Paz (signo del absurdo actual), mas descerebrado que nadie, por el mérito de querer conculcar la libertad primera, la de conciencia, credo y principios a los indómitos y tenaces cristianos que le contradicen sus melonadas. Ahí lo dejo aunque no cejo de hacerlo compartido y laureado con tanta peña tonta a nuestro lado. Y puesto a ello y autocrítico con mi casta se lo otorgo -por arrellanada postura en su peana un curín de cuyo nombre no quiero acordarme y se llama... (lo olvidé)

Angel dijo...

Hay un autor, cura él, prolífico escritor que nos dejó grandes e ingeniosos volúmenes, Cavodevilla... Lo de la piscina seguro que le entusiasmaría... Es una caja de resonancia, como la conciencia pero si se llena de agua y sumergido ahí, no hay sonido ni cerebro ni se puede respirar y vivir. Por eso como mínimo tomamos la bocanada del finde... Bueno, se podría tirar de ese hilo y hacer una alegoría del vivir. Pero me pillas en un stanby que no es aburrido pero si ocurrente... y esto -como en unas volutas que flotan en el aire - me venía así al pensiero.

Hadasita dijo...

En un lugar de Valencia, de cuyo nombre no quiero acordarme, vivían montones de personas de cuyo nombre tampoco quisiera volver a acordarme jamás (entre ellas el cura ese que no nombras). Un NO como una catedral a todos ellos. ¡Menos mal que siempre nos queda la música para saber que no estamos locos, y la gente que como tú entiende su trasfondo, para saber que no estamos solos!.

Wizard Animation