- ¿Qué haces?
- UNIR.
- ¿Unir? ¿Y qué unes?
¡Buena pregunta!.
- Son cosas para el cole.
- ¡Ah! ¡Yo también hago de eso!
Sale corriendo a su habitación, la oigo abrir su cartera, y buscar en su carpeta de deberes. Y vuelve a toda prisa con un cuadernito. Se sienta a mi lado, coge mi lápiz, abre por una hoja y se pone a unir. Unir puntos. Unos con otros. Por orden de numeración. Y sale el dibujo de un pulpo.
- ¿Te gusta?
- ¡Me encanta!
- Pues espera a que lo coloree, ¡coloreo super bien!.
Y vuelve a salir corriendo a buscar su estuche de rotus.
Yo la miro fascinada.
La sencillez de mi peque siempre me deja sin habla.
Acabo de recibir la clase magistral de la semana en Educación Primaria, y no ha sido online por la UNIR (Universidad Internadional de la Rioja), sino en mi propia casa de manos de Hadasita.
Y me he puesto a pensar...
Si nuestros días son puntitos numerados, y Dios es un niño que juega a unir... ¿qué dibujo sacará de mi vida?. ¿Formarán mis estudios en la UNIR parte de un tentáculo de un pulpo gigante coloreado de naranja chillón? ¿Seré capaz, cuando sea Maestra titulada, de enseñar a mis alumnos lo importante que es unir: unir letras para formar palabras; unir personas para que se quieran y ayuden; unir pequeños gestos que hagan la vida más bonita?.
2 comentarios:
me metí en esode la UNIR y veo que es una universidad virtual... flipante. vivan las nuevas tecnologias... ¿tambien se podra confesar por cable? ¿y la penitencia podrá ser por tutoria? jajaja. alucino con los inventos. Y que tierno lo de ir puntito por puntito. El otro dia mirando un caracolet tuve una revelación ¿te la cuento? baboso el animal escribia al sol de la mañana con hilos de oro, asi despacito, como los niños... maravilloso
se me olvidaba: lo de los puntos me hizo pensar tambien en una movida pastoral titulada "el hombre y la linea". Iba la cosa de una linea que retrata distintas situaciones y momentos en las que el ser humano se halla . Ya sabes: lo del eclesiastes y lo de tirar piedras y recoger piedras, amar y odiar, etc etc. Pues bien, lo bonito de hadasita es que el dibujo es sorpresa y maravilla, fruto de la fe y la obediencia. Y yo pienso que los mayores perdimos esa inocencia y esa capacidad de abandono en Aquel que nos quiere. Nos hicimos calculadores y todo lo ciframos y valoramos con algoritmos de productividad, rentabilidad, provecho,interes propio... Y con tantas valas ahi en el corazón se nos fue la limpia y transparente riada de la alegria y el regalo, del patio y los amigos, de los colores primarios,sin grises, mezclados y tenues anodinos de la vida ajetreada y mortal que nos secuestra...
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