Me gusta pensar que Dios pueda hablar así de mí..."No llores tú, hijo mío. ¡Qué malos deben de ser esos que siempre te están regañando sin motivo! ¿Te han llamado sucio porque cuando estabas escribiendo te manchaste de tinta los dedos y la cara? ¿Y no les da vergüenza? ¿Se atreverían a llamar sucia a la luna nueva porque se ha tiznado la cara con tinta?
Hijo mío, por cualquier cosilla te culpan. Todo lo tuyo les parece mal. ¿Que te rompiste tu ropita jugando? ¿Y por eso te llaman destrozón? ¡Y no les da vergüenza! ¿Pues qué dirían de la mañana de otoño cuando sonríe detrás dé las nubes rajadas?
Pero no les hagas tú caso, hijo mío. ¡Qué bien contaditas te tienen tus faltas! Todo el mundo sabe lo goloso que eres. ¿Y por eso te llaman tragón? ¿Y no les da vergüenza? Entonces, ¿cómo nos llamarían a nosotros porque tú nos gustas tanto que te comeríamos a besos?"
2 comentarios:
a mi me pasa que, cuando leo a Tagore en la luna nueva, me acuerdo de Abba querido Dios ¿a ti no te sucede lo mismo?
Angelito: no sé bien a qué te refieres con "Abba querido Dios". Me vienen varias cosas a la cabeza: los cómics de Cortés, los dibujitos aquellos de "Querido Dios" que ilustraban estuches y carpetas cuando era niña, etc. Acláramelo, porfis.
Gracias mil.
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