Me encantan los domingos. Son geniales.Los domingos pongo sábanas limpias.
Los domingos me levanto sin despertador.
Los domingos ando en batín hasta la hora de comer.
Y como en casa, de caliente.
Los domingos juego sin límite de tiempo. Y me rio a gusto. Tesa y yo nos matamos a besos y cosquillas.
Los domingos me pongo en contacto con todas esas personas de las que no me olvido los lunes, pero con las que apenas puedo hablar.
Los domingos no trabajo: disfruto lo que hago, aunque haga lo mismo.
Los domingos puedo leer, y subrayar, y pensar.
Los domingos toco la guitarra. Y canto todo lo que me apetece.
Los domingos despejo la mesa, todo está en su sitio, nada se amontona.
Los domingos sueño lo que quiero que sea la semana que empieza.
Los domingos ventilo la casa, y el corazón.
Sin duda, los domingos deben ser el día del Señor; me recuerdan bastante al Cielo...
11 comentarios:
Jesús celebraba los domingos (en sábado) yendo a la sinagoga... y de la "misa" a la mesa, con Pedro y Santiago y los amiguetes del lago. Los domingos descansaba. Por eso, a la suegra de Pedro, dándole la mano con una sonrisa, a ella sola levantaba.
Ahora bien: el día siguiente empezaba la víspera al ponerse el sol, y ahí la gente se aprovechaba... Marcos nos lo cuenta: todo el mundo a la puerta de la casa estaba, hacían colas, y la gente comentaba: "Tiene una fuerza, un no sé qué". Y a muchos-todos- los curaba. Y aquí el lunes ya no descansaba. Trasnocharon, seguro. Por eso luego le buscaban; porque mientras unos despedían a la gente y otros se caían (de sueño), Jesús se escaqueaba. Iba a su Papá del Cielo y por todos velaba. Santificado sea el amor que a todos crea, que nos dio las fiestas y la pelea.
Me encantan los domingos.Tienes razón tienen mucho de Dios.Pero el lunes también puede ser de Dios ...aunque cueste un poquillo.Prueba.
Por supuesto, Inés. Otro día haré una apología de los lunes, lo prometo. Un abrazo.
Pues, no es por desentonar, chiquita mía, pero el domingo, desde que era muy nana, me cae muy regulín-regulín.
Como mucho, tan solo aceptable y tan solo hasta la hora de comer...
Y tengo la explicación:
el domingo tiene , por día siguente, el lunes...
¡¡¡ Y EL LUNES SIEMPRE FUE TRAUMÁTICOOOO!!! :
- empieza la semana que, vista desde el lunes, parece laaarga, interminaaable...
- Tocaban las peores asignaturas (fueran las que fueran...)
- Los profes aparecían con sus peores caras, y gruñendo a la primera de cambio...
- Ese ejercicio que no hice...¡¡¡FIJO QUE ME LO PILLABAN!!!
LO MEJOR QUE PODÍA OCURRIR CON EL LUNES, ES QUE SONARAN LAS 5 DE LA TARDE PARA SALIR DEL COLE...
Y el domingo yo ya empezaba a vivr ese trauma.
Desde después de comer, empezaban los retortijones en la barriga.
Y los nervios porque doña listilla (yo) había dejado lo mas peñazo de los deberes para última hora de la tarde del domingo...¡¡ UF !!
El viernes por la tarde sí que me sabía a gloria.
Entonces todo era posible: ser buena, responsable, aprovechar el tiempo como Dios manda ...¡¡INCLUSO HABER HECHO LOS DEBERES SIN DEJARLOS PARA EL DOMINGO A ÚLTIMA HORA DE LA TARDE!!
tODO ESO CREÍA EL VIERNES POR LA TARDE.
Pero al llegar el domingo...De nuevo yo era el campo de batalla entre el SER y el DEBER SER...
Y mis retortijones volvían a la barriga mezclados con los remordimientos y el temor al LUNES odioso.
Eso es lo peor del domingo: que detrás está el lunes amenazándonos.
¡¡¡ Y POR ESO VOY A MISA EL SÁBADOOO, JA-JA-JA !!!
El sábado va seguido del domingo.
Y todo día que va seguido de un festivo ¡¡¡ES MAGNÍFICOOO!!!
INEEES, que supriman los luneeees. Que los prohiban. Que los declaren ilegaleeees.
Cuando yo mande, implantaré la semana de 3 días: viernes,sábado y domingoooo.
Y así, los tres serán del Señor, sí, pero sin el menor esfuerzo y con mucha algarabía ¡¡OLEEEE!!
Un achuchón a mi TESITA
Tina, de acuerdo en todo.
(Pobre Hadasita, acabamos de chafarle el comentario).
Anne
Para Tina y Anne: lo mejor para que los domingos sigan siendo domingos hasta el final, y no se interrumpa su mágia después de comer, es quedar a cenar. Y sobre todo, pase lo que pase, llueva o salga el sol, NO TRABAJAR ni hacer deberes ni nada que se le parezca ese día. Y jugar mucho. Eso es fundamental.
Yo prefiero los domingos que los sábados, porque los sábados son día de compra semanal, de limpieza, de corregir exámenes... y suelo arrastrar tanto cansancio de la semana que apenas me cunde. El domingo no tengo que compartirlo con ninguna otra obligación más que la de ser feliz. De todas maneras también en la obligación, y el cansancio, y la prisa, hay bendición (cuando esté un poquito menos cansada escribiré esa entrada para Inés). Besitos a todos.
PD: mi Hadasita me pide que os ponga que ella vota por la semana de 3 días que propone Tina.
Claro, SEMANA DE 3DÍAS.
Y es que seguro que tu Hadasita y Anne, al igual que yo, nos dedicábamos a jugar demasiado el domingo, y , como los deberes no se hacen solos (me consta porque lo intenté concienzudamente)...
Claro, tú haces los deberes el sábado, pero es que yo el sábado estaba muy ocupada jugando y...
En fin, que mi cabolo sigue con la mismita estructura:
¡¡NADA COMO UN DÍA DE FIESTA CUANDO VA SEGUIDO DE OTRO FESTIVO!!
¿Cierto Anne y Hadasita?
No, si yo a jugar me dedicaba la mitad del sábado, de ahí que los domingos no estuviera todo hecho, siempre faltaba algo... Y aunque hubiese estudiado el sábado, el domingo por la tarde ya casi no me acordaba con que... Pero lo de los retortijones de barriga por ir al día siguiente a clase no me los quitaba nadie. Y si encima se me había olvidado algo, hacer algo o llevar el libro, el suelo desaparecía bajo mis pies, todo se volvía negro, un sudor frío me recorría todo el cuerpo, mi corazón bombeaba a la velocidad de la luz... y... casi seguro que me pillaban aunque solo fuera por la cara de fantasma que se me ponía...
Qué trauma, ahora lo estoy reviviendo (incluso cuando de vez en cuando veo a alguna profe... brrrrrr...).
Lo de salir a cenar está bien pero siempre me martillea en la cabeza el "mañana madrugo, mañana madrugo..." y no los disfrutas igual que los sábado o los ¡¡VIERNESSSSSSSS!!
Besitos para Hadasita y Tina. Y si Tesa está de acuerdo conmigo, pues también.
Anne
¿Cuantas horas tiene tu domingo?A mi tambien me gustan aunque, de siempre, su tarde me ha resultado triste. Prefiero los sabados
ANNE, que me moría de risa leyéndote las angustias del domingo por la tarde.
Es que has hecho una exposición magistral del síndrome pre-cole...
Y ciertamente, NOS HA DEJADO MARCADAS ¿EH?
Parece que a Mª Jesús también le pesa algún trauma pre-cole...
En cuanto a TESA, la semana tiene tan solo dos momentos (que no días):
- Cuando está Esther, a quien considera su mami...
- Cuando no está su querida Esther.
Si está, ENTOCES ES DOMINGO DIGAN LO QUE DIGAN LOS DEMÁS Y PONGA LO QUE PONGA EL CALENDARIO.
Si Esther sale (aunque sea por 5 minutos), entonces, de repente, SOBREVIENE EL FATÍDICO LUNES, DE NEGROS NUBARRONES Y PRONÓSTICOS NEFASTOS.
Menos mal que esa situación puede cambiar en un ratito para pasar a disfrutar del mas maravilloso , luminoso y soleado domingo.
Ayer, al ratito de llegar su querida Esther, llegué yo. En cuanto entré, A TESA SE LE PUSO CARA DE HOY ES FIESTA DE GUARDAR, DOMINGO DE RESURRECCIÓN...
y con su colita, a mil por hora, preguntaba:
¿estamos en el cielo? ¿esto es el cielo ya? ¿sí? ¿sí? ¿sí?
A TESA le atrae la semana de un único día: ¡¡DOMINGOOO!!
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