Se define como el comportamiento comunicacional maduro, en el que la persona ni agrede ni se somete a la voluntad de otras, sino que expresa sus convicciones y defiende sus derechos. Decir las cosas con firmeza y hacerlas con fortaleza. Evitar la sumisión, los miedos, sin caer en el extremo contrario de la agresión o la manipulación, pero afirmando mis elecciones y creciendo en respeto propio.
Son mis "deberes" para esta semana, aunque pienso que a todos nos viene bien trabajarla un poquito. En realidad tiene más que ver de lo que pensáis con lo que decíamos ayer de la "restauración"... Aquí un vídeo que, de alguna manera, lo ilustra. Ya me diréis qué os parece el tema.
3 comentarios:
no me cnt al post!
pensava que tu molavas Esther.. :'(
en fin espero que estes bien, y me gusta eso que dces de la asertividad.. =)
besos!
andrea alemany
Me parece estupendo. Creo que yo me voy a apuntar tambien a hacer esos deberes.Mi abuela decía que la mitad de la humanidad es imprudente porque la otra mitad es prudente y de vez en cuando conviene poner las cosas en su sitio. !!Animo!!
Andrea, bonica: no te contesté porque no me dió la vida. No seas susceptible, tontina, que este viernes voy a veros :).
MªJesús: ¡qué alegría que alguien me haya entendido! Hasta ahora, a todo el mundo que le he contado lo de mis "deberes" me han dicho que eso es egoísmo. Ya me advirtió mi médico que a la mayoría le costaría pillarlo... pero yo creo que sí, que es importante trabajar la asertividad... y que nadie más asertivo que el mismo Cristo!!! Un abrazo.
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