Últimamente digo mucho que "necesito" unas vacaciones. En realidad no las necesito, pero las quiero con toda el alma. Cuando me preguntan dónde iría contesto que a Copenhague. Porque para mí es una especie de símbolo: en realidad no es Copenhague en sí, aunque me encantaría ver su "sirena varada"*. Es más la estación de tren, el lugar donde todo se para para comenzar de nuevo en otra dirección o en otro sentido.
La canción de Vetusta Morla lo expresa muchísimo mejor que yo. Y como ando quitando el polvo a mis guitarras, y pese a que Maripili marchó y ésta clásica nueva está tan poco tocada que apenas me suena, mi Hadasita se ha empeñado en subirse a una silla y grabármela. Cosas de niños. Ella se ha muerto de risa viéndome desafinar y perder la nota, mientras Tesa a mi lado se comía un huesito pasando de todo. En fin, a ver si os saco también a vosotros unas risas de domingo por la tarde.
* Héroes del Silencio, "Sirena varada".
2 comentarios:
Cantas bien, el grupo es bueno, lo mismo la canción, muy buena la idea de Hadasita... pero hoy me sale una reflexión en la que Tesa es la artista invitada.
La Copenhague de tu Vetusta habla de viaje y aventura y Dios proveerá. Y veo el vídeo y veo que está Tesita -con su hueso o lo que sea que estuviera mordiendo- y veo que también mañana y pasado y al otro estará ahí. Y me emociono pensando en esas "gentes" en las que se encarnan palabras como amistad, fidelidad, compañerismo.. que son tan difíciles y cuesta encontrarlas en estas nuestras occidentales ciudades asfálticas, colmenas de cemento y metal, con vecindades tan alienadas como inhóspitas, personas de fríos saludos y relaciones esquinadas y algo cortantes, siempre tras las mirillas y telefonillos o con vigilante pagado para salirte al paso y recordarte que cada quien tiene su vida y su tiempo y su espacio privado, excluyente... Hay demasiadas rejas en Nicaragua, demasiados prejuicios en el barrio de la Coma, demasiados protocolos y claves de acceso, demasiados "demasiado"...
Y cuando nos complicado tanto la vida se agradece el que alguien simplemente esté ahí, al lado... Ole por la música y esa aventura de salir fiado a los caminos y al Dios dirá. Ole por la ruta y los amigos que en ella vienen a mi de parte del Amigo. Aplausos también y sobretodo a esos otros hermanitos y bichitos que se nos dieron que para no estar solos, que viajan a nuestro lado sin espavientos ni alboroto y nos dan eso tan rico que nos alienta y alimenta y a ratos se viste de confianza, a ratos de alegría, de latidos muy subidos y algún que otro sentimiento compartido.
Hoy, Tesa, tan pequeña, tan cosita, se me hace gigante ahí, a tu lado, en su faena...
Angelito: Tesa y Hadasita te mandan un besote, y dicen que a ver si te ven pronto, sin mirillas y sin rejas, que te echan de menos... Les va más el umplugged que la letra escrita, jeje. ¡Listas que son!
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